Abinader urge por mayores ingresos, que sólo podrían lograrse con una reforma fiscal
DISTRITO NACIONAL, República Dominicana.-. “El Gobierno no ha aumentado impuestos, porque aquí esta es una sociedad que todos dicen hagan una reforma, pero después nadie quiere la reforma”, con esta declaración pudiera el presidente Luis Abinader incentivar un amplio debate sobre la urgencia de una reforma fiscal, que -según algunos economistas-permitiría reducir el pago y los intereses de la deuda externa en 2026.
Pero el mandatario ve el problema a corto plazo: la carencia de recursos para atender las demandas sociales presiona el Gobierno.
“Este es el Gobierno que tiene la menor cantidad de ingresos en términos del tamaño de su economía”, indicó Abinader al encabezar este viernes una nueva jornada del programa “El Gobierno contigo”, en el municipio de Guerra, en la provincia Santo Domingo.
“Se nos hace muy difícil, y es, como yo he dicho, rindiendo, arañando los chelitos, para poder cumplir”, indicó, prácticamente con un discurso de quejas y lamentaciones.
Los reclamos mayormente al Gobierno vienen por la falta de transporte para estudiantes universitarios, infraestructura educativa insuficiente, hasta carencias en el sector agropecuario y la ausencia de espacios recreativos y judiciales.
“Hemos tomado notas de la mayoría de las urgencias, de las prioridades. Vamos a ir solucionando por prioridades. Vamos a tratar que todos estos temas nosotros (cumplirlos)”, ha asegurado.
El principal problema del Gobierno se centra en las limitaciones fiscales.
“El Gobierno no ha aumentado impuestos, porque aquí esta es una sociedad que todos dicen hagan una reforma, pero después nadie quiere la reforma”, explica el jefe del Estado.
Y ante la situación, Abinader pide que la población cumpla con el pago de los servicios públicos. “Cuando son tasas, como es el caso del pago del agua, de la luz, les pido que cumplan con las facturas, de tal manera que nosotros podamos cumplir con ustedes, porque no es fácil”.
En declaraciones recogidas por el periódico Diario Libre, que indica que “Hasta que el Gobierno no realice un ajuste fiscal “de cierta magnitud” el pago de intereses de la deuda, que son producto del déficit que mantiene el Estado cada año, continuará aumentando, según explicó el economista Raúl Ovalle, socio-director de la firma Analytica.
“Tenemos que prepararnos para que se diseñe una reforma que, entre otras cosas, permita reducir el déficit fiscal y contener esa carga de intereses porque mientras aumente esta siga creciendo el espacio fiscal disponible para que el Gobierno invierta en infraestructuras o en programas sociales se ve afectado y reducido”, declaró.
Igualmente, el catedrático e investigador de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, Francisco Tavárez, afirmó que el tema debe ser abordado necesariamente a través de una reforma fiscal que permita reducir el peso de los intereses de la deuda y generar una menor presión de deuda.
Otras opiniones
La incapacidad fiscal que impide al Estado la posibilidad de financiar bienes públicos; la ineficacia estatal que se manifiesta con la duplicidad de instituciones con las mismas funciones, y que compromete el gasto público; la insostenibilidad financiera del sector eléctrico, que absorbe una impresionante cantidad de recursos; la insuficiencia del sistema de seguridad social para proteger a las personas, sobre todo en el aspecto salud; la insuficiencia o caducidad de las regulaciones salariales, y la protección social limitada, son seis aspectos que evidencian la necesidad de la reforma fiscal.
Así lo planteó en julio de 2024 el ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, Pável Isa Contreras, al participar en el “Foro de discusión sobre la reforma fiscal”, organizado por el Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC).
Sostuvo que una reforma fiscal debe verse como una pieza que forma parte de un conjunto de reformas cuyo objetivo es sostener y acelerar el crecimiento económico y potenciar su impacto en el bienestar de la población.
En ese mismo evento, el economista y pasado rector del INTEC, Rolando Guzmán afirmó que el consenso es que se efectúe la reforma fiscal, por lo que señaló que no merece la pena una discusión de reforma sino consideramos la importancia de su magnitud. “La reforma fiscal debería aspirar a una meta de aumentar la presión tributaria a un 6% del PIB, logrado con el trabajo de varias gestiones de Gobierno, para realmente acercarnos a las aspiraciones que se plantearon en la Estrategia Nacional de Desarrollo”.
Magdalena Lizardo, docente del INTEC y directora de Grupo Consultoría Pareto, expresó que desde el 1990 se han aprobado 50 leyes de otorgan exenciones impositivas, 40 de ellas vinculadas a crear regímenes de tratamiento especial que en muchos de los casos procuran fomentar el desarrollo productivo y la creación de empleo. El problema es que se ha creado un sistema tributario que es prácticamente un jarro con muchos agujeros que afecta la eficiencia y equidad de la estructura tributaria y complejiza la administración del sistema, lo que facilita la evasión.
Los comentarios están cerrados.