Fallo judicial contra Álvaro Uribe, en primera instancia, desata choque entre Estados Unidos y gobierno de Gustavo Petro
Bogotá/Washington.-. Además de la ebullición política generada a lo interno de Colombia por el fallo emitido por una jueza contra el expresidente Álvaro Uribe, que lo condena por los delitos de fraude procesal y soborno en actuación penal, el conflicto judicial desata un enfrentamiento entre los gobiernos de los presidentes Donald Trump y Gustavo Petro.
Aunque un fallo definitivo se conocerá el viernes (1 de agosto), el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, ha salido en defensa del exmandatario, quien enfrenta un proceso judicial desde el año 2012 por la acusación de haber tenido presuntas relaciones esas estructuras criminales durante su mandato.
Tan pronto fue conocido el fallo de la jueza Sandra Liliana Heredia, del 44 Distrito Penal de Bogotá, el jefe de la diplomacia estadounidense descalificó la decisión, ya que entiende hay una “instrumentalización del poder judicial colombiano por parte de jueces radicales”, lo que interpreta como “un precedente preocupante”.
En el criterio de Rubio, “el único delito del expresidente colombiano Uribe ha sido lucha incansablemente y defender su patria”.
A las críticas de Rubio se unió la congresista estadounidense María Élvira Salazar. En su visión, “No se hizo justicia en Colombia. Se consumó una infamia contra Álvaro Uribe, el hombre que rescató al país del terrorismo y enfrentó a las FARC cuando nadie más se atrevía”.
“Lo condenan porque se negó a pactar con criminales, porque es un obstáculo para la izquierda radical que quiere tomar el poder y convertir a Colombia en otra Venezuela. Es el mismo libreto del castrochavismo: persecución política contra todo el que se oponga a sus agendas radicales”, agregó la legisladora.

En medio del caldeado ambiente creado por el fallo de la jueza, la defensa de Uribe ya tiene lista la apelación de lo que se considera una “decisión injusta”.
Tras emitido el fallo, la fiscal primera delegada ante la Corte Suprema de Justicia, Marlene Orjuela, pidió que se emita una sentencia de 108 meses de prisión. Pidió que se fije una multa de 1.600 salarios mínimos legales vigentes, como lo estipula la ley, así como una inhabilidad para ejercer cargos públicos por nueve años.
Según la apreciación de la magistrada, “Se ha acreditado más allá de duda razonable que Álvaro Uribe Vélez determinó dolosamente a Diego Javier Cadena Ramírez (quien guarda prisión) en la ejecución de los delitos de soborno en actuación penal en concurso homogéneo y fraude procesal en concurso homogéneo”.
Agregó en su dictamen, “con estos comportamientos queda claro también que afectó gravemente el bien jurídico de la administración de justicia, el bien protegido tanto por el delito de soborno en la actuación penal como por fraude procesal y que como ya se ha resaltado, él mismo no se ejerció contra cualquier juez, sino que fue directamente contra la Corte Suprema de Justicia”.
El viernes será la fecha clave para conocer el monto de la pena y la medida de aseguramiento contra el jefe natural del Centro Democrático.
Petro responde a Rubio
Al responder a la defensa que hizo Rubio a favor de Álvaro Uribe, el presidente colombiano Gustavo Petro consideró que constituye una violación a los principios diplomáticos.
“Intromisión en asuntos judiciales de otro país, es una intromisión a la soberanía nacional”, aseguró.

También la canciller colombiana Rosa Villavivencio ha cuestionado la postura del jefe de la diplomacia estadounidense. En un comunicado oficial proclama que el país cuenta con un sistema judicial autónomo y pidió no interferir en sus procesos.
“Su intromisión en asuntos judiciales colombianos vulnera nuestra soberanía y desconoce la independencia de la justicia”, insistió.
De su lado, el presidente del Congreso, Lidio García, dijo que “la decisión de primera instancia en contra del presidente Uribe es lamentable, pero no constituye el final del proceso. El Estado de derecho establece mecanismos y recursos para que se revaloren los argumentos y las decisiones tomadas”.
“Expresamos nuestro pleno respaldo al expresidente en estas instancias y confiamos en que podrá demostrar nuevamente la solidez de sus fundamentos. Esperamos que sus argumentos sean evaluados con la serenidad y el rigor que exige un caso que, debido a su naturaleza, despierta tantas pasiones”, agregó.